Visitar al médico para hacerse revisiones periódicas es una parte importante de mantenerse sano. Cuando se tienen relaciones sexuales, esas visitas son aún más esenciales.
Estar sexualmente sano incluye hacerse pruebas y recibir tratamiento para cualquier infección o enfermedad. Estas son las pruebas que deberías realizarte en las revisiones periódicas si eres sexualmente activo, y por qué son importantes.
VPH y pruebas de Papanicolaou
El virus del papiloma humano es la infección de transmisión sexual más frecuente. Aunque la infección puede desaparecer por sí sola, ciertos tipos de VPH causan verrugas genitales y cáncer.
Cualquiera puede contraer el VPH y transmitírselo a otra persona durante las relaciones sexuales, pero sólo las personas con vagina pueden someterse a la prueba. Para ello, un médico extrae células del cuello uterino para analizarlas. Si el resultado de la prueba es positivo para el VPH, el médico realizará una prueba de Papanicolaou, también llamada citología vaginal o cribado cervical, que sigue un proceso similar al de la prueba del VPH. Esa prueba mostrará si hay células anormales en el cuello uterino que puedan provocar cáncer de cuello uterino.
El VPH no tiene cura, pero las verrugas pueden desaparecer por sí solas o con tratamiento. Dado que tener el VPH significa que podrías tener cáncer en el futuro, es conveniente que sigas haciéndote pruebas de Papanicolaou con regularidad. Sin embargo, puedes prevenir el VPH con una vacuna, que puedes solicitar en una revisión periódica.
Incluso si no tiene el VPH, debería hacerse una prueba de Papanicolaou a partir de los 20 años y someterse tanto a la prueba del VPH como a la de Papanicolaou cada cinco años.
Pruebas de gonorrea y clamidia
La gonorrea y la clamidia son infecciones de transmisión sexual que pueden causar enfermedad inflamatoria pélvica en personas con vagina. Esta enfermedad puede causar posteriormente embarazos ectópicos, que son embarazos fuera del útero que no pueden progresar, o infertilidad.
En las personas con testículos, la gonorrea y la clamidia pueden provocar una afección dolorosa en los conductos que van unidos a los testículos y pueden causar infertilidad, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, la agencia nacional de salud pública del país.
Cuando te hagan la prueba de estas dos ITS, darás una muestra de orina o un médico puede tomar una muestra de células de la vagina, el pene, el recto o la garganta. Si el resultado es positivo, la cura para ambas ITS es un antibiótico.
Otras pruebas
Aunque el VPH, la clamidia y la gonorrea son las ITS más comunes, hay otras infecciones para las que conviene hacerse pruebas a fin de evitar problemas de salud:
- El herpes oral o genital puede causar llagas y ampollas alrededor de la boca o los genitales. El tratamiento puede prevenir o acortar los brotes, pero no tiene cura. Hacerse las pruebas y recibir tratamiento en las revisiones periódicas puede ayudarle a evitar transmitir el herpes a su pareja.
- La hepatitis B es una infección hepática. Aunque existen opciones de tratamiento, no hay cura. Afortunadamente, existe una vacuna, que puede solicitar en una revisión periódica.
- El virus de la inmunodeficiencia humana, conocido como VIH, ataca al sistema inmunitario. Aunque existen opciones de tratamiento, no hay cura. Si mantienes cualquier tipo de relación sexual, debes someterte a la prueba del VIH al menos una vez y quizá más a menudo.
- La sífilis es una infección que puede causar úlceras y, sin tratamiento, dañar el corazón, el cerebro y otros órganos. Recibir tratamiento puede curar la sífilis.
- La tricomoniasis es una enfermedad causada por un parásito que puede provocar picor, ardor y molestias durante las relaciones sexuales. Recibir tratamiento puede curar la tricomoniasis.
Puede empezar a hacerse revisiones periódicas con la ayuda de Neighborhood Healthcare, que ofrece citas en persona y por vídeo, así como opciones gratuitas y de bajo coste para los pacientes que cumplan los requisitos. Haga su cita en línea en nhcare.org o llamando al 833-867-4642.